Locales | 28/03/2017
19 de marzo de 1976
El día en que echaron a los concejales
Sucedió en los días previos al último Golpe de Estado. Más de dos mil personas conducidas por referentes gremiales de distintas extracciones exigieron, de manera violenta, la renuncia de los ediles. El argumento fue “la apatía para resolver asuntos” de la ciudad. Aún hoy se tejen muchas historias sobre las verdaderas razones de ese acontecimiento.
El 19 de marzo de 1976, los seis concejales de Firmat fueron presionados para dejar sus cargos. Los obligaron a renunciar. A dejar sin poder Legislativo a la ciudad. El hecho se denominó Firmatazo y ocurrió en los días previos al Golpe.
Según detalla El Correo de Firmat del 25 de marzo del ´76, unas 2.500 personas lideradas por dirigentes gremiales de distintos sectores exigieron por la fuerza la renuncia de todos los legisladores locales. El argumento de los manifestantes fue la “apatía” de los ediles “para resolver asuntos” de la ciudad.
Los manifestantes destrozaron el recinto legislativo, ubicado por entonces en San Martín 1371. Vidrios, rejas y mobiliario fueron despedazados. Presos del miedo, algunos ediles escaparon por los patios vecinos.
Tras el suceso, la multitud marchó hacia la casa del intendente Roque Vassalli para manifestarle su adhesión. Le pidieron que no renuncie. Horas antes, el mandatario había tomado esa decisión porque conocía el malestar de la multitud con algunas autoridades locales.
El 22 de marzo, Vassalli reasumió como Intendente. Al día siguiente, volvió a renunciar manifestando que lo hacía con el fin de contribuir a la “pacificación” y a “la unidad” de la ciudad que vivía un complejo momento institucional.
El 24 de marzo, con el aval de buena parte de la sociedad argentina, los militares tomaron el país por asalto. Días más tarde, restituyeron como máxima autoridad local a Roque Vassalli. Un manto de silencio cubrió los acontecimientos del 19 de marzo del ‘76.Los concejales Los concejales de Firmat en ese momento eran: Guillermo Pascual, Héctor Poeylaut, Osvaldo Rossi, Héctor Bazet, Pablo Real Solari y Juan C. Bulgheroni.
En 2016, al conmemorarse 40 años de este lamentable suceso, el diputado Gabriel Real, hijo de Pablo Real Solari, planteó que aquellos sucesos fueron perpetrados por un grupo de “ciudadanos manejados políticamente por la intendencia, que eran empleados de la UOM y de otros gremios”.
“En el clima enrarecido que vivía Argentina, esto fue una cuestión menor, pero para los firmatenses fue importante. Acá hubo concejales elegidos por el pueblo que fueron echados por una barra brava de personas que estaban manejadas políticamente desde los organismos sindicales de Firmat”, aseguró Real.