Tiene 36 años, vive con su esposo Henry y su hija Nina. Nació en Caracas (Venezuela), y junto a su esposo, llegaron a nuestra ciudad hace tres años. “Llegamos a Firmat porque cuando nos tocó emigrar de nuestro país, nos pusimos en contacto con unos amigos que conocimos por Internet hace ya unos quince años, y a los que en un momento habíamos podido visitar, así que ellos nos recibieron y nos apoyaron muchísimo cuando llegamos” precisó María Gabriela.

-¿Cómo fue comenzar a vivir en un nuevo país?

-Antes de llegar a Firmat vivíamos en un pueblo costero de Venezuela, un lugar hermoso que en algún momento había sido turístico, a diez minutos de las playas del Mar Caribe. Es el lugar de nacimiento de mi esposo y también de Purrucitos, que comenzó ahí.

Los últimos meses antes de venir a vivir a Argentina fueron muy difíciles para nosotros, yo estaba embarazada y llegó un momento en el que se convirtió en una lucha por la supervivencia. No se conseguían medicamentos esenciales, faltaban servicios básicos, los alimentos muy caros, entonces decidimos que teníamos que irnos para poder darle a nuestra hija una vida mejor, y para nosotros mismos.

Vivir en otro país no se nos hizo tan difícil, porque nuestro norte estaba primeramente en que nuestra hija pudiera nacer bien, que nada le faltara y yo creo que ese es el motor que nos mueve día a día, así que no nos costó mucho adaptarnos.  

Cada curso de Administración, de Fotografía, de Manipulación de Alimentos, todo ha sido útil. Creemos siempre que capacitarse es la única manera de poder crecer como emprendedores porque no lo sabemos todo, no manejamos todos los ámbitos que se necesitan manejar
“Amo ver recetas: canales de recetas, recetas en YouTube, todo recetas, lo vuelvo loco a mi esposo (ríe), aprendo de todo lo que veo y me gusta mucho crear, entonces he agrupado todo lo que me gusta y lo he llevado a la cocina”.
En lo que hace a la participación de “Purrucitos” en espacios de Ferias Gastronómicas, señala que en noviembre de 2018, comenzaron a sumarse a ferias en nuestra ciudad, no aún en otras localidades.

-¿Qué otras actividades disfrutas hacer?

-Nuestro día a día lo pasamos en familia, gracias a Dios tenemos la oportunidad de trabajar en nuestro emprendimiento y en casa, así que compaginamos la crianza de nuestra hija, con las cosas del día a día de un hogar.

Me gusta aprender todo lo que pueda de lo que me gusta. Amo la fotografía, el diseño también, esa es una pasión que compartimos con mi esposo y que nos conecta muchísimo. En mi tiempo libre me gusta descansar (ríe), tratamos de compartir con nuestra hija lo más que podemos, me gusta pintar y disfrutar la naturaleza y las plantas.

-¿Cuáles son tus sueños?

-En lo personal, poder cumplir el propósito que Dios tiene para mí, como esposa, como hija, como madre. Dedicarme más tiempo a mí misma y seguir haciendo lo que tanto me gusta.

Lo que más me gusta de haber iniciado nuestro propio emprendimiento es que he-mos podido estar con nuestra hija durante sus primeros años de vida. Pero también, que nos ha hecho querer crecer más en nuestras habilidades, y que podemos hacer algo que nos gusta, esforzándonos por algo que es nuestro.

En lo laboral quisiera seguir viendo a Purrucitos crecer, nos ha llevado un tiempo conocer el público y el ambiente en el que estamos, que no es el mismo que de donde nosotros venimos, así que seguimos aprendiendo, corrigiendo errores y apostando a que lo podemos hacer cada vez mejor.

-¿Qué repercusiones tienen tus trabajos?

-Nuestro producto sólo se puede vender en Firmat, sin embargo, hemos alcanzado también otras localidades (Chabás, Chañar Ladeado, Bombal) clientes que vienen a Firmat y nos dicen “teníamos que pasar por unos Purrucitos”.

Eso es muy gratificante, porque sabemos que hemos creado un vínculo también con ellos y a la distancia, cuando vienen a la ciudad piensan en nosotros, no te puedo explicar la alegría que se siente.

Creemos que Purrucitos genera un lazo de querer compartir, de celebrar la vida, de momentos familiares o con amigos, o la simpleza de darte un gusto a solas. Cuando están en un lugar comiendo y celebrando algo y piensan “¿Pedimos Purrucitos?” ya el estar en sus mentes, más allá del postre, sino como marca que te genera un sentimiento de alegría, saber que nos esperan con emoción, eso es algo inigualable.

-¿Dónde querrías que tu emprendimiento esté en 10 años? 

-Estamos en un momento en el que nos planteamos las diferentes direcciones que puede tomar el emprendimiento, pero no es algo que tengamos definido aún, sin embar-go, la meta siempre es crecer.

Nos gusta probar cosas diferentes, así que nos encantaría probar otras técnicas y adquirir nuevos conocimientos. Me gustaría poder capacitar a otras personas, y compartir mis conocimientos, pero aún me falta tanto por aprender, que antes de hacerlo me gustaría capacitarme más.

-¿Cuál sería tu consejo para quien está considerando emprender? 

-Que no tenga miedo de hacerlo, para emprender lo primero que debemos perder es el miedo. Una vez que comienzas, si amas lo que estás haciendo va a darse con mucha más facilidad que si buscamos algo solo por hacer. Lo demás, es capacitarse siempre, buscar mejorar, querer ser mejor cada día. Cuando hagas un producto, pensar “¿Cómo me gustaría a mí que sea el producto que voy a comprar?” y entonces así le das forma a ese producto y le imprimes tu personalidad y eso lo hace único.

-¿Dónde podemos encontrar tu emprendimiento?

-Estamos en Instagram: @Purrucitos y @Purrucitos.cakes, en Facebook: Purrucitos Dulces, y por supuesto pueden pasar por el local en calle San Martín 1341 (al lado de la Librería La Capital) por las tardes, y hacemos delivery por la noche de martes a domingo.

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